El desafío de las universidades tradicionales
¿Cómo podría aportar mayor valor una universidad con aulas de cemento y alumnos de carne y hueso, contra una exclusivamente virtual, más económica y con la misma validez a nivel curricular?
La diferenciación desde mi punto de vista podría estar en la atención personalizada para diferentes estilos de aprendizaje, pero existe un gran desafío en la incorporación del "habitar en la red" al aprender.
Esta ruta me enseñó “haciendo”,
es decir, me convertí en un nodo de información dentro de mi grupo. También
practiqué los tres “niveles” de información: búsqueda, creación de contenido y
publicación de la misma al usar mi blog, y finalmente, promocioné mi
publicación entre mi grupo. Esta práctica me permite visualizar como podría
trabajar con un grupo de estudiantes, y buscar objetivos de aprendizaje en
búsqueda, generación de opinión y por último que otros estudiantes opinen al
respecto, o tomen una postura. Aprendí también que cada que leo respecto de los
avances tecnológicos que se pueden aplicar en la práctica docente, me doy
cuenta que las opciones son más, las tendencias son nuevas y las posibilidades
son diferentes, entonces me hace ser cada vez más consciente de la velocidad
con la que cambian las opciones y tendencias, y tomar la ruta me ayuda a
esforzarme por integrarme al aprendizaje en red, para aprovecharlo en mis
cursos.
La reflexión acerca de lo que
hacemos en la docencia y como lo hacemos, es otra información que surge de la
reflexión no solo mía, sino de todo el grupo, pues al leer las colaboraciones
de otros, me doy cuenta que compartimos la misma preocupación relacionada con
el mundo de posibilidades y opciones existentes, de cómo se están haciendo
experimentos y grupos piloto relacionados con el aprendizaje, y el reto que
esto representa para los profesores.
También descubrí que es más fácil
mantener un blog cuando el tema es apasionante para el usuario, pues invita a
seguir buscando información, opinando al respecto, y publicando; por lo que me
obliga a repensar cómo aplicarlo en aula, pero definitivamente considero que es
una práctica necesaria para los estudiantes, publicar textos más largos que un
tweet o una entrada en Facebook, pues necesitan desarrollar habilidades de
redacción, composición y ortografía que a muchos de ellos los ayudará en un
futuro.
El aprendizaje en red puede ser
limitativo, mientras que el aprendizaje en la red, permite enriquecerse del
aprendizaje de otros, generar opiniones, posturas, y no hay límite en la
distancia o el huso horario, por lo que es un desafío que considero podría
darse en el futuro cercano, que las universidades tradicionales propicien cursos semi
presenciales, en donde la interacción se lleve a cabo con estudiantes de cursos
similares en otras partes del mundo, para enriquecer el aprendizaje en la red,
las habilidades de logro de objetivos, solución de problemas, interacción en
áreas de especialidad, entre otras.
Muchas gracias por la paciencia que
representa leernos a todos en tan corto tiempo, motivarnos a continuar, y
darnos oportunidades extras para seguir adelante. Aunque regularmente me uno a
estas rutas, siempre aprendo algo nuevo, y me atrevo a algo diferente en aula,
por lo que seguiré haciéndolo, porque además me doy cuenta que actualizan la
información, y eso es una gran ayuda.
Hola Gabi, super interesantes tus reflexiones. Me parece clave lo que mencionas respecto de mantener un blog, que resulta más sencillo cuando el tema te apasiona. Creo que eso se traslada también a muchos otros ámbitos, el educativo sin duda.
ResponderEliminarMe surgió una inquietud cuando hablas de que aprender en red es limitativo. En ese sentido me gustaría conocer un poco más a qué te refieres, en qué sentido te parece limitativo... en lo personal cuando hablas unas líneas más adelante sobre la posibilidad de interacción entre universidades en ambientes semipresenciales me remite a ambos elementos: en red (conectados unos con otros en sentido de construir juntos, en este caso las universidades y alumnos) y en la red (utilizando medios digitales), qué opinas?
Muchos saludos,
Ninfa